Tres personas han fallecido a causa de un brote de listeriosis relacionado con carnes frías de la marca Boar's Head, según informaron el jueves las autoridades federales de seguridad alimentaria. Hasta ahora, el brote ha afectado a 43 personas. El último deceso se produjo en Virginia, mientras que las otras dos muertes ocurrieron en Nueva Jersey e Illinois, según confirmaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Desde la última actualización del 31 de julio, se han registrado nueve nuevos casos, lo que indica que el brote comenzó a finales de mayo.

Boar's Head retiró del mercado 3.170 toneladas de productos de carne el 30 de julio, ampliando un retiro anterior realizado el 25 de julio, después de que una muestra de paté de hígado en Maryland diera positivo en listeria. El jueves, los CDC señalaron que las autoridades de salud de Nueva York también encontraron la misma cepa de la bacteria en otra muestra de paté.

El retiro incluye más de 70 productos, como paté de hígado, jamón, salami de ternera y salchichas ahumadas, todos ellos producidos en la planta de la empresa en Jarratt, Virginia. Boar’s Head enfrenta ya dos demandas relacionadas con este brote, una en Missouri y otra colectiva en Nueva York.

La carne retirada se distribuyó en tiendas de todo el país, así como en las Islas Caimán, República Dominicana, México y Panamá. Las autoridades instan a los consumidores a no consumir estos productos y a desecharlos o devolverlos para obtener un reembolso. La listeria es una bacteria que puede crecer en el refrigerador, por lo que es importante limpiar y desinfectar adecuadamente el lugar donde se almacenaron estos productos para evitar más contagios.

Según los CDC, cada año, unas 1.600 personas se ven afectadas por listeriosis en Estados Unidos, y aproximadamente 260 de ellas mueren. Los síntomas incluyen fiebre, dolores musculares y fatiga, aunque en casos graves puede causar confusión y convulsiones, siendo especialmente peligrosa para personas mayores, inmunodeprimidas y embarazadas. Los síntomas pueden tardar semanas en aparecer tras la ingesta de alimentos contaminados.